Decides remodelar tu casa, renovar un local comercial o realizar mejoras en un edificio. Todo va bien hasta que te topas con una instalación eléctrica vieja, defectuosa o directamente peligrosa. Lo peor que puedes hacer es intervenirla sin preparación. Muchas personas cometen este error y luego enfrentan consecuencias graves: fallas, cortocircuitos, incendios o incluso accidentes personales.
¿Por qué es fundamental actuar con criterio antes de intervenir una instalación eléctrica?
Porque los errores se pagan caro. Antes de tocar un solo tornillo o cable, necesitas saber cómo evaluar el estado actual de la instalación y actuar con prudencia. Este tipo de intervenciones sin planificación pueden provocar:
- Riesgos eléctricos graves.
- Daños a electrodomésticos y equipos.
- Mala manipulación del sistema eléctrico que salen más caras a largo plazo.
- Ir de vacaciones con nuestro creador permanentemente.
1. Desconectar la energía eléctrica
Parece básico, pero es uno de los pasos más ignorados. Nunca empieces a revisar, desmontar o manipular una instalación sin antes cortar la alimentación eléctrica general desde el tablero.
¿Por qué es esencial?
- Previene electrocuciones.
- Evita reencendidos accidentales.
- Protege a quienes puedan estar cerca de la zona de trabajo.
Consejo práctico
Coloca señalización visible (como una etiqueta o cinta) que indique que se está trabajando en el sistema eléctrico.
2. Verificar Ausencia de Tensión
No basta con bajar el breaker. Debes comprobar con herramientas adecuadas que no haya corriente en los puntos que vas a revisar o reemplazar.
¿Cómo hacerlo?
- Usa un detector de voltaje o multímetro.
- Revisa cada toma, interruptor o punto de conexión donde se planea intervenir.
Importante
Algunas viviendas o locales tienen doble alimentación eléctrica. Siempre verifica todas las fases antes de continuar.
3. Usar Herramientas Aisladas
Muchas personas creen que pueden usar cualquier destornillador o alicate. Error. Las herramientas para trabajos eléctricos deben estar aisladas y certificadas para prevenir accidentes.
Verifica que:
- Estén en buen estado y sin grietas.
- Sean de marcas reconocidas con aislamiento hasta 1000V (baja tensión).
Ejemplo cotidiano
Manipular una caja de tomas con herramientas comunes aumenta muchísimo el riesgo de descarga si la instalación aún tiene energía residual.
4. No Trabajar en Zonas Húmedas
La humedad y la electricidad no se mezclan. Si el área donde está la instalación eléctrica tiene filtraciones, agua estancada o alta humedad, no inicies el trabajo.
¿Qué hacer?
- Espera a que el área esté completamente seca.
- Usa botas y guantes dieléctricos si necesitas inspeccionar antes.
Consejo técnico
Aunque la instalación esté aparentemente “apagada”, el agua puede provocar conductividad en puntos inesperados.
5. Informar a Otros
Puede que tú sepas que vas a intervenir una parte del sistema eléctrico, pero ¿lo saben los demás en casa o en el local? Debes comunicarlo claramente.
¿Por qué hacerlo?
- Evita que alguien vuelva a encender el sistema sin querer.
- Protege a otras personas que puedan acercarse sin saber que se trabaja ahí.
Extra
Si hay niños o personas mayores, es crucial mantenerlos alejados del área intervenida.
Información extra
Cada país tiene sus reglas. En Ecuador, por ejemplo, está la Norma Ecuatoriana de la Construcción (NEC) y los requisitos de ARCONEL. Antes de reemplazar un tomacorriente o remodelar el cableado, revisa si necesitas permisos o si hay normas técnicas que aplicar.
Conclusión
Actuar con desconocimiento en temas eléctricos es una de las principales causas de fallos y accidentes en viviendas y comercios. Estas acciones previas a intervenir instalaciones eléctricas son tu primera línea de defensa para garantizar una remodelación segura y efectiva.